A Shin-ae Yoo la persigue la mala suerte. Después de años de sufrimiento, le cerró la puerta al amor y a la posibilidad de relacionarse con otras personas. Pero su apacible vida antisocial empieza a cambiar el día que su carácter la traiciona y un desconocido se cruza en su camino.
Quimchee es intolerante a la lactosa, pero ama los lácteos y no puede abandonarlos. Así que, si la buscan, suele estar en el baño... Dibujando, probablemente.